Oleato de vainilla: usos, propiedades y elaboración
¡Hola a todos! 😃
En esta entrada vamos a ver cómo preparar un oleato de vainilla y qué usos podemos darle dentro de la cosmética natural, pero antes de eso veremos qué hace tan especial a la vainilla, de dónde procede y algunas de sus propiedades.
La vainilla pertenece a la familia de las Orquídeas, cuyas especies habitan en regiones tropicales de América y Asia. Esta planta es originaria de México e intentó cultivarse en Europa, pero no consiguieron que su flor diese fruto; esto se debe a que era necesaria la polinización por parte de una especie de abeja nativa de México que no existía en Europa, por lo que la polinización se debía hacer de forma artificial, razón por la cual la vainilla es tan costosa en la mayoría de los países.
El fruto de la vainilla consiste en una cápsula o vaina que alberga las semillas de la planta. El principal componente de esta vaina es la vainillina, que es la responsable del sabor y aroma característicos de la vainilla.
Con el fin de poder obtener este componente más fácilmente, se desarrollaron determinadas técnicas para obtenerlo de forma sintética a partir de productos de la pulpa de la madera o plantas ricas en eugenol.
Usos y propiedades de la vainilla
Lo más destacable de la vainilla es su aroma y sabor. Es muy usada tanto en repostería como perfumería, de hecho, la vainillina está presente en la mayoría de perfumes y ambientadores (solo tenéis que leer las etiquetas para comprobarlo).
En esta entrada nos vamos a centrar en sus usos cosméticos, y ya que su aroma es muy bien aceptado por la mayoría de la gente, podemos utilizarlo para elaborar distintos productos a los que queramos otorgar ese olor característico.
Además, su aroma posee propiedades calmantes, motivadoras y afrodisíacas (sobre todo en hombres), por lo que podemos elaborar cremas, aceites, bálsamos, bombas de baño y cualquier otro producto al que queramos atribuir estas propiedades.
Elaboración
¡Vamos con la parte que nos gusta! la receta para obtener el oleato de vainilla.
Se trata de una maceración de la vaina en aceite; este aceite extraerá las propiedades de la vainilla y obtendremos un aceite muy aromático para usarlo posteriormente en nuestros productos de cosmética natural.
Para este macerado he usado aceite de almendras, que aunque no es un aceite muy extractivo por su alto nivel de ácido oleico, este oleato quiero usarlo para elaborar bálsamos labiales y aceites de masaje, y prefiero usar aceite de almendras por la hidratación que aporta, pero si vosotros preferís utilizar otro aceite podéis hacerlo perfectamente.
Para elaborar este oleato necesitaremos:
- Una o dos vainas de vainilla.
- Aceite de almendras.
- Vitamina E (tocopherol).
- Un cuchillo para abrir las vainas.
- Un frasco de cristal esterilizado previamente. Podemos hacerlo metiendo el frasco y la tapa en una olla con agua hirviendo durante 15-20 minutos o vaporizando con alcohol 70º y dejándolo secar.
1. Haremos un corte longitudinal a la vaina con el cuchillo.
2. Si abrimos la vaina por el corte que hemos hecho, podremos ir raspando y recogiendo con el cuchillo las semillas del interior de la vaina.
3. Según vayamos sacando semillas las iremos depositando en el frasco de vidrio.
Una vez hayamos sacado las semillas, cortaremos las vainas y las pondremos también en el frasco.
4. Llenaremos el frasco con el aceite de almendras.
5. Agregaremos un chorrito de vitamina E para evitar el enranciamiento del aceite.
6. Tapamos bien el frasco ¡y listo!
Guardaremos el frasco en un lugar seco y oscuro (como un armario) y agitaremos todos los días durante cuatro semanas, después filtraremos el aceite para quitar las semillas y las vainas de vainilla y ya tendremos listo nuestro aceite.
Podemos utilizarlo como aceite de masaje, como componente para un bálsamo labial o incluso para elaborar un perfume sólido, ¡hay muchas posibilidades!
¿Qué os ha parecido esta receta? ¿Habíais hecho alguna vez este oleato? ¿Qué ideas se os ocurren para utilizarlo? Dejádmelo en los comentarios 😄
En esta entrada vamos a ver cómo preparar un oleato de vainilla y qué usos podemos darle dentro de la cosmética natural, pero antes de eso veremos qué hace tan especial a la vainilla, de dónde procede y algunas de sus propiedades.
La vainilla pertenece a la familia de las Orquídeas, cuyas especies habitan en regiones tropicales de América y Asia. Esta planta es originaria de México e intentó cultivarse en Europa, pero no consiguieron que su flor diese fruto; esto se debe a que era necesaria la polinización por parte de una especie de abeja nativa de México que no existía en Europa, por lo que la polinización se debía hacer de forma artificial, razón por la cual la vainilla es tan costosa en la mayoría de los países.
El fruto de la vainilla consiste en una cápsula o vaina que alberga las semillas de la planta. El principal componente de esta vaina es la vainillina, que es la responsable del sabor y aroma característicos de la vainilla.
Con el fin de poder obtener este componente más fácilmente, se desarrollaron determinadas técnicas para obtenerlo de forma sintética a partir de productos de la pulpa de la madera o plantas ricas en eugenol.
Usos y propiedades de la vainilla
Lo más destacable de la vainilla es su aroma y sabor. Es muy usada tanto en repostería como perfumería, de hecho, la vainillina está presente en la mayoría de perfumes y ambientadores (solo tenéis que leer las etiquetas para comprobarlo).
En esta entrada nos vamos a centrar en sus usos cosméticos, y ya que su aroma es muy bien aceptado por la mayoría de la gente, podemos utilizarlo para elaborar distintos productos a los que queramos otorgar ese olor característico.
Además, su aroma posee propiedades calmantes, motivadoras y afrodisíacas (sobre todo en hombres), por lo que podemos elaborar cremas, aceites, bálsamos, bombas de baño y cualquier otro producto al que queramos atribuir estas propiedades.
Elaboración
¡Vamos con la parte que nos gusta! la receta para obtener el oleato de vainilla.
Se trata de una maceración de la vaina en aceite; este aceite extraerá las propiedades de la vainilla y obtendremos un aceite muy aromático para usarlo posteriormente en nuestros productos de cosmética natural.
Para este macerado he usado aceite de almendras, que aunque no es un aceite muy extractivo por su alto nivel de ácido oleico, este oleato quiero usarlo para elaborar bálsamos labiales y aceites de masaje, y prefiero usar aceite de almendras por la hidratación que aporta, pero si vosotros preferís utilizar otro aceite podéis hacerlo perfectamente.
Para elaborar este oleato necesitaremos:
- Una o dos vainas de vainilla.
- Aceite de almendras.
- Vitamina E (tocopherol).
- Un cuchillo para abrir las vainas.
- Un frasco de cristal esterilizado previamente. Podemos hacerlo metiendo el frasco y la tapa en una olla con agua hirviendo durante 15-20 minutos o vaporizando con alcohol 70º y dejándolo secar.
1. Haremos un corte longitudinal a la vaina con el cuchillo.
2. Si abrimos la vaina por el corte que hemos hecho, podremos ir raspando y recogiendo con el cuchillo las semillas del interior de la vaina.
3. Según vayamos sacando semillas las iremos depositando en el frasco de vidrio.
Una vez hayamos sacado las semillas, cortaremos las vainas y las pondremos también en el frasco.
4. Llenaremos el frasco con el aceite de almendras.
5. Agregaremos un chorrito de vitamina E para evitar el enranciamiento del aceite.
6. Tapamos bien el frasco ¡y listo!
Guardaremos el frasco en un lugar seco y oscuro (como un armario) y agitaremos todos los días durante cuatro semanas, después filtraremos el aceite para quitar las semillas y las vainas de vainilla y ya tendremos listo nuestro aceite.
Podemos utilizarlo como aceite de masaje, como componente para un bálsamo labial o incluso para elaborar un perfume sólido, ¡hay muchas posibilidades!
¿Qué os ha parecido esta receta? ¿Habíais hecho alguna vez este oleato? ¿Qué ideas se os ocurren para utilizarlo? Dejádmelo en los comentarios 😄
Se podría usar como aceite hidratante corporal directamente? El aroma a vainilla es ligero o se nota con fuerza?
ResponderEliminar¡Hola, Vega! Sí, claro, se puede usar como aceite corporal, te recomendaría que te lo aplicases recién duchada con la piel ligeramente húmeda, de esta manera se absorbe mejor. El aroma a vainilla es ligero, no es muy fuerte, si quieres que el olor se note aún más le podrías agregar 5 gotas de aroma de vainilla. ¡Gracias por tu comentario!
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