Crema otoñal + receta "Curcu-latte"

¡Hola a todos! 😄

Estamos ya en octubre y el otoño ha entrado de nuevo en nuestras vidas, y aunque a algunos pueda entristecerles la idea de que el verano se acaba, es una buena oportunidad para aprovechar aquellas frutas y plantas que nos ofrece esta maravillosa época del año, por eso en la entrada de hoy vamos a hacer una crema facial otoñal muy agradable de aplicar que tendrá propiedades antioxidantes, calmantes e hidratantes, dando como resultado una estupenda crema antiarrugas para piel seca y sensible.

¿Por qué crema otoñal? Pues porque utilizaremos ingredientes y aceites de esta temporada como los aceites vegetales de avellana (penetrante y protector), nuez (rico en vitaminas del grupo B), pepita de uva (antioxidante y regulador), higo (rico en vitamina E, omega-6 y esteroles), y además, extracto de granada (antioxidante y regenerante).
Para nuestra fase acuosa utilizaremos hidrolato de tilo (calmante e iluminador) y gel de lino (rico en mucílagos).

Como emulsionante voy a utilizar lecitina de soja, un emulsionante vegetal con el que se puede trabajar en caliente o en frío; en esta receta lo utilizaré en frío para no calentar demasiado las fases y conservar mejor las propiedades de los ingredientes. De acuerdo a la ficha técnica del fabricante, la lecitina de soja se añade entre un 3 y un 5% del total de la fórmula.
Las cremas elaboradas con este emulsionante resultan cremas muy fluidas y generalmente de rápida absorción.

¡Y sin más dilación pasamos a la receta! Además, después os daré otra receta de una bebida calentita y reconfortante muy apropiada para las tardes lluviosas, el "curcu-latte".

Ingredientes:

Fase acuosa:

- Hidrolato de tilo 50,2%
- Gel de lino 15%
- Kiosmetine 0,3%
- Glicerina 1,5%
- Goma xantana 0,2%

Fase oleosa:

- Aceite de nuez 5%
- Aceite de avellana 5%
- Aceite de pepita de uva 5%
- Aceite de salvado de arroz 7%
- Aceite de higo 2%
- Lecitina de soja 4%

Fase activos:

- Extracto CO2 de granada 2%
- Alfa bisabolol 0,2%
- Provitamina b5 1%
- Cosgard 0,6%
- Aceites esenciales 1% (yo he utilizado 0,6% de palo de Ho y 0,4% de mirra)
- Ácido láctico para regular el pH

El proceso de elaboración es el siguiente:

Desinfectamos todos los utensilios pulverizando con alcohol y dejando secar.
Primero vamos a hacer el gel de lino, preparamos un vaso con 3 gramos de semillas de lino. Después calentamos 50 gramos de agua destilada en un cazo y cuando empiece a hervir vertemos el agua en el vaso que contiene las semillas de lino y dejamos reposar 10 minutos.
Cuando pase ese tiempo filtramos con un filtro de café y reservamos.

En un recipiente ponemos la glicerina y la goma xantana y removemos hasta que se integre, después añadimos el gel de lino, el hidrolato de tilo y el kiosmetine, removemos bien todo para que se integre.

En otro recipiente ponemos los aceites de la fase oleosa junto con la lecitina de soja y mezclamos. En este caso vamos a hacer la emulsión en frío, por eso ponemos juntos todos los aceites, tanto los que son termolábiles como los que no.

Vertemos la fase oleosa sobre la acuosa y batimos con una batidora de mano hasta que se haga la emulsión.
Añadimos los ingredientes de la fase de activos, mezclamos bien y medimos el pH. En mi caso añadí 3 gotas de ácido láctico para regular el pH.
Envasamos en un recipiente ¡y listo! Os aconsejo que utilicéis un bote tipo airless o similar, ya que la crema es bastante fluida como para envasar en tarro.


Como veis la textura es bastante fluida, además se absorbe rápidamente y deja una sensación de hidratación en la piel muy agradable.


Receta "Curcu-latte"

Lo he denominado "curcu-latte" por ponerle un nombre más gracioso, pero podéis haberlo leído como leche de cúrcuma, leche de oro o golden milk. Es una bebida caliente, reconfortante y original para esas tardes lluviosas de otoño en las que nos apetece tomar algo calentito bajo el abrigo de una manta.
Los ingredientes que necesitaremos son:

- 150 gramos de leche (animal o vegetal, yo he utilizado leche de almendras).
- Media cucharada de café de cúrcuma.
- Una cucharada pequeña de miel (podéis añadir más o menos en función de lo dulce que lo queráis).
- Canela en polvo al gusto.

Simplemente tenemos que poner la leche caliente en una taza, espolvorear la cúrcuma mientras removemos, echar la cucharada de miel y remover nuevamente, y finalmente espolvoreamos la canela. ¡Ya está listo para disfrutar! A mi personalmente me encanta su sabor.


Espero que os hayan gustado las recetas, ¡nos vemos en la siguiente entrada!



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